Tema: Agustín se disculpa ante Jerónimo
Agustín saluda en el Señor a Jerónimo, señor queridísimo y deseadísimo, hermano digno de honor en Cristo y copresbítero.
¿Hipona? Año 402.
1 1. Oí que habían llegado a tus manos mis cartas, mas no inculpo a tu caridad de no haber recibido todavía tu contestación. Sin duda hubo algún impedimento. Por donde conozco que tengo que rogar más bien al Señor para que otorgue a tu voluntad un medio fácil de enviar la respuesta. Facilidad de responder ya te la dio. Si quieres, puedes fácilmente.
2 2. Vacilé si debía creer algo de que me han informado. Pero no debí vacilar en tomar pie de ello para escribirte. Es lo siguiente en pocas palabras. Me han dicho que no sé qué hermanos han sugerido a tu caridad que yo he escrito un libro contra ti y que lo he enviado a Roma. Sábete que eso es falso. Pongo por testigo a nuestro Dios de que no lo he hecho. Si en algunos de mis escritos se encuentra algo en que mi opinión sea distinta de la tuya, deberás comprender que no escribo contra ti, sino que escribo lo que me parece a mí. Si no puedes reconocerlo, créelo. Y, en verdad, digo esto porque estoy totalmente dispuesto a recibir fraternalmente tu opinión contraria, si hay algo que te extrañe en mis escritos. Y hasta me alegraré de que me corrijas y de tu misma benevolencia al hacerlo. Aún más, te lo pido y lo anhelo.
3. ¡Oh si me fuese posible, ya que no vivir contigo, por lo menos gozar en el Señor de tu proximidad y de una dulce y frecuente conversación! Mas esto no me es dado. Por eso te pido que vivamos juntos en el Señor cuanto podamos. Así, procura mantener este deseo, aumentarlo y perfeccionarlo, y no desdeñes mis respuestas, aunque parezcan raras. Transmite mi saludo obsequioso al santo hermano Pauliniano y a todos los hermanos que gozan contigo y de ti en el Señor. Él te escuche en todo tu santo deseo, sin olvidarte de nosotros, señor carísimo y deseado y hermano honorable en el Señor.